A lo largo de su evolución, el sector de telecomunicaciones ha transitado por distintas etapas de crecimiento: desde la expansión impulsada por la telefonía fija, posteriormente la telefonía móvil y, más recientemente, la banda ancha. Hoy en día, atraviesa un periodo de crecimiento moderado, centrando sus prioridades hacia 2030 en optimizar costos, rentabilizar inversiones previas y explorar nuevas oportunidades de fusiones y adquisiciones (M&A).
Tres ejes estratégicos para el crecimiento futuro
1. Inteligencia Artificial Generativa (Gen AI)
Las empresas del sector están adoptando la inteligencia artificial generativa para mejorar la eficiencia operativa y ofrecer nuevos servicios digitales. Algunas compañías incluso están construyendo centros de datos propios para brindar capacidades de entrenamiento y procesamiento como servicio.
La gran oportunidad se encuentra en conectar la infraestructura necesaria para la IA: centros de datos, chips, redes de fibra óptica y usuarios finales. Sin embargo, actualmente la mayoría de las aplicaciones de gen AI no requieren un ancho de banda elevado, lo que limita los ingresos inmediatos por conectividad. A mediano plazo, el uso de dispositivos con chips de IA integrados podría reducir aún más esa dependencia de red.
Un desarrollo emergente dentro del sector es el concepto de AI-RAN, que propone incorporar chips de IA generativa en las torres de telecomunicaciones para gestionar redes más flexibles y aprovechar su capacidad de procesamiento, generando nuevas fuentes de ingresos.
2. 6G: una generación enfocada en la rentabilidad
Las compañías buscan evitar repetir el patrón del 5G, caracterizado por grandes inversiones sin una monetización clara a corto plazo. Por ello, el desarrollo de 6G se centra en la eficiencia y rentabilidad, con prioridades como:
- Reducir el costo por gigabyte (GB).
- Mejorar la eficiencia energética.
- Desarrollar redes heterogéneas que integren Wi-Fi, satélite y tecnologías 5G/6G.
- Fomentar la asequibilidad para reducir la brecha digital.
El objetivo es que las telco participen activamente en el diseño e implementación de 6G para garantizar un modelo sostenible que permita monetizar la conectividad de próxima generación.
3. Resurgimiento del M&A con impulso del capital privado
Después de varios años desinvirtiendo en activos no estratégicos, el sector de telecomunicaciones podría vivir en 2025 un renovado auge en fusiones y adquisiciones, impulsado principalmente por fondos de capital privado. De hecho, el 80% de las operaciones de M&A en 2024 fueron protagonizadas por este tipo de inversores.
Los centros de datos destinados a IA generativa se han convertido en un punto clave de inversión, seguidos por las redes de fibra óptica, que lideraron el volumen de operaciones de infraestructura en 2024. En este contexto, las empresas deberán definir con claridad qué activos son estratégicos y cómo monetizar los restantes sin comprometer su capacidad operativa.
El sector de telecomunicaciones enfrenta un momento decisivo. Las oportunidades que ofrecen la inteligencia artificial, las redes 6G y los nuevos modelos de negocio son enormes, pero también conllevan retos significativos. Las decisiones estratégicas que se adopten en los próximos años determinarán el rumbo del sector y su capacidad para seguir siendo un pilar fundamental de la transformación digital global.